Anecdotario de Terapia Ocupacional -Otoño 2018

Escrito por Residencia. Publicado en BLOG / News

Algunas personas opinan que el otoño es una estación triste porque hace frío, llueve, hay nieblas, y se caen las hojas de los árboles y parece que todo está triste. Pero todo depende del cristal con el que lo miremos. Unas hojas secas pueden ser algo divertido y espectacular.

En este trimestre hemos tenido un poco de todo, una pequeña excursión al pueblo, recetas de cocina, cumpliendo deseos, súper bingo, grupo de manualidosas y muchas cosas más…

Según el modelo de Atención Centrado en la Persona, también depende mucho del ojo con el que miremos las cosas. Al igual que el otoño, para algunas personas puede ser triste y para otros puede ser espectacular; lo mismo ocurre con los deseos y las decisiones de las personas mayores. Hay que tener siempre en cuenta que lo que para una puede ser algo genial para otra puede ser un sufrimiento.

De ahí que les tengamos en cuenta de forma personal. Cada uno es una persona diferente, aunque en algunas cosas confluyan, cada persona es única a los demás. Como profesionales que trabajan con personas mayores debemos tener en cuenta esta individualidad y siempre preguntarles qué opinan, qué les gusta, o más importante qué les gustaría hacer nuevo.

Os dejamos el Anecdotario de OTOÑO 2018, Esperamos que os guste, porque nos lo hemos pasado “súper” bien.

  • Hay algunos deseos personales que no solo implican a la propia persona, sino que implica a otra o a más personas. Para Dionisio, Zapatero de toda la vida, le encanta enseñar el museo del calzado en la Zapatería que trabajaba del pueblo. Pero en su proyecto de vida comento que le gustaría que sus compañeros de residencia pudieran ir a verlo un día. Él sabe que algunos no pueden ir al pueblo andando. Asique montamos una pequeña excursión para visitar el museo. Ana y Dionisio nos lo enseñaron. Os invitamos a ir a conocerlo.
  • En algunas ocasiones parece que las dificultades físicas pueden ser impedimento para hacer actividades concretas. Pero este es uno de esos ejemplos donde la terapia ocupacional aplica todos sus fundamentos. Cipri ahora mismo no puede usar una de sus manos y un día nos dijo “que pena que no puedo jugar a las cartas porque me gusta, pero como no puedo sujetar las cartas…”. ¿Cómo? Me pregunte, esto no puede ser. La terapia ocupacional adapta los objetos y la forma de hacer las actividades para que una persona, que en un momento determinado y por los motivos que sean no puede hacer algo, pueda hacerlo de otra forma y poder disfrutar de lo que más le gusta. Pero los terapeutas no trabajamos solos, nos encanta trabajar en equipo. En este caso Luis gerocultor de unidad se interesó por el tema y junto con Miguel Ángel de mantenimiento adaptamos un sistema para que Cipri pueda jugar a la brisca con una sola mano.
  • Todos los trimestres nos encanta preparar alguna recetilla sencilla en las unidades de convivencia. Cocinar un cocido entero no podemos hacer, pero si pequeñas recetas para almorzar o merendar. Que nosotros mismos podemos cortar, untar, y montar con el apoyo de las gerocultoras y de los técnicos. Esta vez dado que en otoño hace un poco de frio, algo calentito nunca viene mal, hemos preparado unos sándwiches. Primero elegimos que queríamos meter en ellos y otro día los preparamos con unas sanwicheras para tostar el pan. ¡Que gusto da oler a pan caliente y al instante de haberlo hecho comerlo que se enfría!!!.  Hasta versión dulce para los más golosos.
  • Para una persona mayor cumplir años es algo especial. Sobre todo si pasas de los 85. Así que, qué mejor forma que celebrar varios cumples “echando un bingo”. Igual que en las unidades de convivencia utilizamos las mesas del comedor para jugar a cartas o al bingo. Pues un bingo para el comedor grande. “Todos atentos que vamos para bingo” … y al final todo es suerte. Y para terminar una votación por que Nosotros también queremos tener nombre como tienen las unidades. Asique por mayoría de votos el comedor general se llama a partir de ahora “Comedor Sagrada Familia”.
  • En otoño pocos días podemos salir a la calle, el que no hace aire, hacer frio, o llueve. Castilla es así, decimos. Pues vamos a preparar las cosas para Navidades. Como el año pasado formamos el grupo de las personas que le gustan hacer manualidades. Este año con nuevas integrantes muy habilidosas y comprometidas. Asique queda inaugurado el “grupo de Manualidosas” para la temporada 2018. Cada una se lleva su tarea en una bolsa y en sus ratos libres corta piezas, enrosca alambre… “lo que haga falta Virginia”. Me dicen. Y luego lo traen raudas y veloces a la sala de la terapia para el montaje. Hay algunas que les gusta más cortar, otras les gusta colocar las piezas y otras ayudar en el montaje. Al final cada pieza tiene un poquito de muchas personas.
  • Y para terminar el otoño. Volvemos a ser profes por un día. Encantados de que nos inviten a ir al instituto a contar cosas de antaño. Para que los chavales sepan cómo era la vida de antes. Cada uno contamos nuestra vivencia y contestamos a las preguntas que nos hacen, aunque no son muchas, todavía son jóvenes y les da vergüenza preguntar. Nosotros encantados de ir a estar con ellos porque nos acogen maravillosamente. Gracias al instituto porque es una experiencia muy especial para nosotros. 

Esperamos que disfrutéis del Anecdotario y os deseamos Felices Fiestas y que paséis un maravilloso invierno.

¡Hasta el próximo anecdotario!!!

Un saludo

Virginia Flores

Terapeuta Ocupacional J